miércoles, 1 de agosto de 2007

PALABRAS QUE ALIENTAN

Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, con un corazón purificado de la mala conciencia, y con nuestro cuerpo lavado con agua pura”.


La ofrenda única de Cristo en la cruz y el beneficio que representa, son eternamente eficaces. La perfecta salvación en Cristo se imparte a todos los que se van santificando, a medina que se acercan a Dios, por medio de Cristo. En contraste con el acceso limitado a Dios que tenían los israelitas, Cristo al dar su vida como sacrificio perfecto, nos abrió el camino a la misma presencia de Dios y al trono de la gracia. Por lo tanto, podemos en gratitud, acercarnos constantemente a Dios en oración, porque la fe y el acercamiento al altísimo, por medio de Jesucristo, son inseparables. Al acercarnos a Dios mediante Cristo, encontramos misericordia, gracia, ayuda, salvación, santificación y purificación; y es evidente que esto implica que si no tengo un acercamiento a Dios en oración y comunión con Cristo, tampoco hay fe salvadora en mí.

¡¡Por lo tanto me acercaré confiadamente al trono de la gracia!!

Esteban Rodríguez/

No hay comentarios: