lunes, 2 de julio de 2007

Palabras que alientan

"Si alzo mi cabeza, tú me cazas como león y vuelves a hacer maravillas”.

Cuando estamos sufriendo aflicción severa, a veces sentimos que Dios está en contra. Pero hay una revelación más completa que ofrece el Nuevo Testamento (NT) sobre la aflicción, con el resultado de que el creyente (o sea, yo) puede incluso gloriarse en el sufrimiento. Pablo le escribió a los corintios sobre su tribulación y en medio de ella perdió la esperanza de conservar la vida; pero aun en su aflicción Pablo bendijo a Dios porque su presencia y su Espíritu estaban con él para consolarlo. Todos los grandes santos de Dios han experimentado la verdad bíblica de ser uno con Dios y su Reino y, estar dedicado a sus caminos y normas no necesariamente acarrea la liberación del sufrimiento terrenal, sino una liberación para experimentar el sufrimiento terrenal con Cristo. Si ellos pasaron por grandes sufrimientos y aflicciones y vieron la gloria de Dios, ¿no crees que tú también puedes verla? ¡¡Eres un santo de Dios!!

Esteban
Rodríguez /elsanadorherido.org@hotmail.com