lunes, 9 de julio de 2007

REFLEXIONES BIBLICAS

Pedid y se os dará (Juan 15:7)

El deseo de Cristo es que los creyentes puedan tener confianza en Él, que al pedir puedan recibir. El secreto de la oración contestada es permanecer en Cristo. Cuanto más cerca uno viva de Cristo, mediante la meditación y el estudio de las escrituras, tanto más estarán de acuerdo nuestras oraciones con la naturaleza y la palabra de Cristo, y por consiguiente más eficaces serán. (Juan 14:13, 15:4).

La oración es imprescindible, para mantener la unidad y la santidad en el pueblo de Dios. Un pueblo que no ora no puede mantener la armonía entre hermanos. Por consiguiente debemos orar en todo tiempo, sin importar el lugar o la hora.

Así que cuando lleguen las dificultades, ora, y todo será más fácil. No te turbes, simplemente ora, que Dios te escuchará.

(1 Tesalonicenses 5:17).

Oliver Patricio/